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El Clima y
la salud |
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La climatoterapia es el conjunto
de medios médicos,
higiénicos, hoteleros, hospitalarios y sociales puestos en
marcha para la utilización terapéutica de los climas.
Los efectos bienhechores de los climas son
conocidos desde hace largo
tiempo, pero hay que esperar al final
del siglo XIX para que sean empleados sistemáticamente para
tratar ciertas enfermedades.
En efecto, poco antes de 1900 se crean
en Suiza los primeros sanatorios. En los distintos países
se reglamentan estos establecimientos por la vía legal. Especialmente
se les destina a la lucha contra la tuberculosis. Algunas poblaciones
se clasifican como estaciones climáticas; más tarde,
con la creación de la
Seguridad Social, la climatoterapia entra en un período de
desarrollo que permite a todos beneficiarse de ella. |
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climatoterapia |
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Esta climatoterapia social, complemento del
termalismo, cuyo desarrollo es paralelo, se destina cada día
más a afecciones no tuberculosas, sobre todo después
de 1952, fecha de la introducción de la isoniazida en el tratamiento
de la tuberculosis. Después de este período, numerosas
estaciones han variado sus indicaciones o se han abierto a nuevas
categorías de pacientes. |
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La eleccion del
clima en el Tiempo |
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Además de los sanatorios y preventorios,
han aparecido aeriums (para niños exentos de todo ataque tuberculoso
pero deficientes), colonias sanitarias (colonias de vacaciones para
niños deficientes o convalecientes), hogares de niños
(en las estaciones balnearias o de deportes de invierno, para los
niños a los que sus padres no pueden acompañar) y establecimientos
especializados (lo más frecuente en las estaciones que son
a un tiempo climáticas y termales) para afecciones bien definidas
que necesitan cuidados o regímenes especiales (anemias, diabetes,
retrasos físicos o psíquicos, etc.).
Más recientemente, la creación en Font-Romeu, Francia
(altura 1 800 m), de un centro de entrenamiento deportivo de alta altitud,
con ocasión de los Juegos Olímpicos de México
(altitud 2 200 m), ha abierto un nuevo camino a la climatoterapia,
aunque no se trata propiamente hablando de climatoterapia, ya que este
tipo de centro va dirigido a personas de reconocida buena salud. |
Las zonas polucionadas, principalmente las
de ciertas grandes aglomeraciones urbanas o industriales, son nefastas
para todos, sanos o enfermos.
El alejamiento en un clima más
sano es, pues, deseable. Para los enfermos, la elección del
tiempo es esencial, ya que permite en algunos
casos una verdadera acción
terapéutica: es el médico la persona indicada
para hacer esta elección. Para las personas sanas, también
es útil una elección; hay que tener en cuenta el temperamento,
las predisposiciones de contagio del estado actual del sujeto para
decidir el lugar de vacaciones y de descanso. |
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